10/04/2007

Se equivoca de país, de continente y de siglo

Es la frase de la semana. Tras la propuesta de Ibarretxe, esta ha sido la frase más escuchada en los hogares españoles. Y lo cierto es que no le falta razón. A estas alturas, es decir, en el momento en el que vivimos que todavia se planteen reformas colonialistas es absurdo y desfasado. El asunto del nacionalismo y la desmembración de territorios en diferentes estados y la proclamación de ideas que llevan a someterse a un victimismo extremo no estan alejadas de lo que podia suceder en la Europa del siglo XIV, pero en el siglo XXI esto es absurdo, y más cuando se intenta tapar con un discurso de calado nacionalista las ausencias en políticas sociales. Que, mal que les pese, es donde caen todas las fuerzas nacionalistas. Aprovechan un discurso propio de un territorio ensalzando sus virtudes y manteniendo una opresión inexistente de cara a un electorado sensible a los sentimientos y no a las realidades sociales de una zona concreta. Por todo ello, me limito a afirmar que no nos encontramos en situación de plantear ideas absurdas y desfasadas.

Y por ende, que se preocupen los vascos más por el precio de la vivienda o por el desarrollo socioeconómico de su territorio que no por si tienen más o menos dependencia del estado.

Por último, no debemos obviar que la independencia es absurda, no en ningún caso el federalismo, ya que ambos conceptos, mal que les pese a algunos, son contra puestos ya que suponen ideas diferentes.

Por todo ello, viva una España federal.

3 comentarios:

nes dijo...

A esto se añade el agravante del eufemismo que encierra el propio término de independencia, en tiempos donde el mundo se globaliza cada vez más, y la gestiones de instituciones reducidas, lejos de proporcionar autonomía, generan dependencia de entes, que no Estados, que escapan al completo control de la voluntad de los ciudadanos.

Julio dijo...

No me parece bien que el principal argumento contra la idea de independencia, que no es más que una idea de soberania ligada a la concepción moderna de estado-nación, sea la de que es una idea "absurda" (palabra aparecida en el texto tres veces). Bajo mi punto de vista, no debería de haber ningún problema en que la gente, así como decide de forma indirecta las políticas que quiere, que también lo hagan, y de forma directa, sobre los límites de la soberanía de su propio colectivo. La gente tiene que decidir, y si deciden ser independientes, no veo nada en contra. No lo veo nada absurdo.

Y de la opresión inexistente, digamos que la situación de inclusión de Cataluña en territorio español no es más que una consecuencia historica. Y la política, creo, que no se debe de basar en perpetuar aquello que la historia mantiene sino en tornar justas situacions históricamente injustas.

Anónimo dijo...

juas!
Federar-se amb qui?
Per federar-se (el símil del casament és molt vàlid) necessites algú que es vulgui federar amb tu. Quants federalistes hi han a Espanya (excepte a Catalunya em refereixo)???
Si considereu la independència d'absurd, què podria opinar jo d'aquesta situació tant absurda (la d'arribar al dia del casament tot sol i sense parella, juas!!!).
A més, sempre s'ha dit que "volem la mateixa independència que la que té França, Grècia o Portugal (sempre dins la unió europea), per tant independència d'espanya per poder dependre (econòmicament, ...) lliurement de la resta d'estats del món (especialment dels propers).
A més si la independència és tant absurda, com és que hi ha més joves (àmbit en el qual us moveu) que opten per partits independentistes que pels federalistes?
Això és una qüestió de generació, teniu uns pensaments molt poc moderns. D'aquí 15 anys ja veurem qui us vota!!!
Salut!